Aprovechando que ahora es el tiempo de las fresas, os voy a
hablar de esta sabrosa fruta.
Lo primero que destaca en las fresas es su alto contenido en
vitamina C. Probablemente haya mucha gente que desconozca que tiene más
vitamina C que la naranja, concretamente nos aporta unos 60 mg por cada 100
gramos.
La vitamina C ayuda a fortalecer nuestras defensas, además
ayuda a cicatrizar nuestras heridas y a absorber el hierro que consumimos.
Las fresas contienen muy pocas calorías, por lo cual es
ideal para tomar en las dietas de adelgazamiento.
Además tienen un alto poder diurético que ayuda a evitar la
retención de líquidos. Otra cualidad relacionada con lo anterior es la buena
dosis de fibra que contiene.
Pero sus propiedades no acaban aquí, posee vitamina E,
potasio y magnesio.
También contienen ácido salicílico por lo que tienen
propiedades analgésicas y antiinflamatorias.
Cómo véis está llena de propiedades y cualidades que hacen
que las fresas, además de ser un pequeño manjar sea un alimento
nutricionalmente magnífico para nuestro organismo.
Así que ya sabéis, consumid en esta época todas las fresas
que podáis y vuestro cuerpo os lo agredecerá.