LA IMPORTANCIA DEL AGUA EN LA DIETA 1º PARTE

Está claro que si hablo del agua, todos sabemos que ésta es imprescindible para la vida y que sin ella, apenas podríamos vivir unos días.

Pero hay muchas cosas sobre el agua que mucha gente ignora.

El agua ayuda contra la retención de líquidos, un poderoso enemigo a la hora de adelgazar cuya una de las principales causas que lo provocan es la falta de suficiente agua.

Como mínimo debemos beber 2 litros de agua al día, los que practiquen deportes, sobre todo, de resistencia o los que tengan trabajos muy físicos deben llegar a los tres litros, sobre todo en verano. Hay que tener en cuenta que también ingerimos agua a través de los alimentos, sobre todo frutas y verduras.

También ayuda contra el estreñimiento eliminando las toxinas acumuladas a través de la orina y a mantener el tono muscular.

La falta de agua también provoca cansancio, por lo que si te sientes cansado sin motivo aparente, bebe más agua, pues ahí puede estar el problema.

Para darse cuenta de la importancia del agua  sólo hay que tener en cuenta que sobre el 60% de nuestro cuerpo es agua.

Se debe beber agua antes de que sintamos sed, ya que ésta es síntoma de que empezamos a estar un poco deshidratados, por lo tanto, si podéis os recomiendo que tengáis siempre a mano una botella de agua para ir bebiendo a pequeños sorbos.

Para saber si estamos bien hidratados hay un pequeño y fácil truco que es tomar como referencia tu orina, si ésta es amarilla debes aumentar la cantidad de agua, si, por el contrario, ésta tiene un color transparente entonces estamos bien hidratados.

Por la importancia del agua, en la próxima entrada seguiré hablando de lo más importante que tenemos en este planeta.

LOS PELIGROS DE LA BOLLERÍA INDUSTRIAL

En esta entrada os voy a hablar de uno de los mayores enemigos que tenemos en nuestra alimentación: la bollería industrial.

Yo siempre recomiendo llevar una dieta sana y equilibrada y hay muy pocos alimentos que prohíbo, sólo tomarlos con moderación.

Pero uno de las pocos que recomiendo eliminar o reducir al mínimo es la bollería industrial.

En este tipo de bollería están incluidos los dulces, los panes industriales, las galletas, etc.

Estos alimentos están llenos de azúcares simples y de grasas, entre las que destaca por su carácter nocivo las llamadas grasas trans.

Estas grasas, también conocidas como grasas vegetales hidrogenadas, elevan el colesterol y los triglicéridos por lo que aumentan el riesgo de padecer problemas cardiovasculares y de padecer cáncer.

Incluso, hay estudios como el de la Univeridad de Navarra que sugieren que aumentan el riesgo de sufrir depresión.

Además, este tipo de alimentos tienen muchas calorías vacías sin prácticamente vitaminas ni minerales por lo que no ofrecen ninguna ventaja para nuestra correcta alimentación.

Una sola pieza tiene de media unas 450 calorías por 100 gramos, pudiendo llegar a tener hasta 600 calorías. Esto supone la tercera o cuarta parte de las calorías totales que debe tomar una persona al día.

Por si esto fuera poco, cada vez se está extendiendo más entre niños y adultos la costumbre de desayunar bollería dándole cada vez menos importancia al desayuno, cuando éste es la comida más importante del día.

Así que como ya he dicho, si queréis llevar una alimentación sana y equilibrada olvidaros de estos alimentos.

LA IMPORTANCIA DE LOS HIDRATOS DE CARBONO

Desde hace un tiempo asisto atónito, como muchas dietas de adelgazamiento propugnan una reducción incluso drástica de los hidratos de carbono en la dieta.

Todas estas dietas son consecuencia del daño que ha hecho la famosísima Dieta Dukan, quizás algún día hable de los peligros de esta dieta pero ahora quiero centrarme en la importancia que tienen los hidratos de carbono también llamados glúcidos.

Los hidratos de carbono son nuestro principal combustible, y, por lo tanto, son imprescindibles en nuestra dieta.

Aproximadamente el 50-55% de las calorías que consumimos deben provenir de los hidratos. Si eres deportista de largas distancias, esta cantidad debe ser algo mayor.

Ahora bien, ¿Qué tipo de carbohidratos debemos consumir?

Esa es la clave, no todos los hidratos son iguales ni mucho menos.

Hay que priorizar el consumo de frutas, verduras, legumbres y cereales integrales.

El problema es meter en el mismo saco a todos los carbohidratos, yo aconsejo reducir al mínimo el consumo de azúcar, dulces y pan y cereales refinados. Sólo quien haga deportes de resistencia debe consumir estos hidratos simples durante y después de los entrenos y competiciones.

Tampoco podemos olvidar que consumiéndolos integrales, nos aseguraremos la cantidad necesaria de fibra y, además, el índice glucémico de estos es bajo por lo que el cuerpo tarda más en asimilar los alimentos y tenemos más tiempo para quemar las calorías, dicho de otro modo, entre mas elevado sea el índice glucémico de un alimento, mas nos engordará porque tardará menos en llegar a la sangre.

En conclusión, si queréis iniciar una dieta de adelgazamiento, huid de las que propugnen una gran reducción de los hidratos, y siempre que podáis intentad  darle prioridad a los cereales integrales, frutas y verduras sobre los cereales refinados y los alimentos con azúcar, los cuales debéis ir retirándolos de vuestra dieta.

CERVEZA SIN ALCOHOL: UNA EXCELENTE BEBIDA PARA HIDRATARNOS TRAS UN ESFUERZO FÍSICO

Por experiencia, veo que mucha gente se hidrata con agua o con bebidas isotónicas,  otras optan por la cerveza normal pero muy pocas por la que considero una de las mejores: la cerveza sin alcohol o O,O.

Este tipo de cerveza es completísima, está compuesta por más de un 90% de agua, tiene sodio, potasio, magnesio, fósforo y yodo por lo que reestablecen el equilibrio electrolítico, además de poseer vitaminas del grupo B.

 Al contrario de lo que piensa mucha gente, tiene muy pocas calorías y, por lo tanto, son una excelente manera de recuperarnos de un esfuerzo de larga duración.

Sólo les veo un problema y es que causan gases, por lo tanto, tampoco hay que abusar.

Lo ideal sería beber agua en primer lugar y después, beberse 1-2 cervezas sin alcohol dependiendo de lo largo que haya sido el esfuerzo realizado.

En cuanto a la cerveza con alcohol, no la recomiendo en absoluto, ya que el alcohol, además de engordar, deshidrata y, por lo tanto, aunque sé que a muchos deportistas les gusta tomarse unas cervecitas con alcohol después de practicar deporte, lo que van a conseguir es ralentizar la recuperación.

Como conclusión, decir que cada vez más estudios corroboran que lo más adecuado para una buena recuperación post-entreno es, como ya he dicho antes, beber primero agua y después una cerveza sin nada de alcohol, siempre que estéis acostumbrados a la cerveza, ya que si no lo estáis, el gas que lleva os puede sentar mal.