Probablemente habréis escuchado hablar sobre el índice
glucémico de los alimentos. El Indice glucémico(IG) está muy de moda
últimamente en el mundo de la nutrición.
Lo primero que hay que saber es su significado.
Se puede definir como una medida de los efectos de los
hidratos de carbono sobre los niveles de azúcar en la sangre. Los hidratos que
se descomponen rápidamente en el torrente sanguíneo tienen un Indice glucémico
alto mientras que los que se descomponen más lentamente, liberando la glucosa
de forma más gradual en el torrente sanguíneo tienen un índice glucémico bajo.
Es decir, que los hidratos de carbono con IG alto provisten de energía rápidamente al organismo
pero si no se gastan se convierten en grasas mientras que los hidratos de carbono
con IG bajo proveen al organismo la energía poco a poco y tardan más en
convertirse en grasas.
Ejemplos de alimentos con índice glucémico alto serían el
azúcar, la miel, el plan blanco o el arroz blanco.
Al contrario alimentos como los vegetales verdes, frutas
como el melocotón y la pera y las legumbres tienen un índice glucémico bajo.
En general, los alimentos integrales tienen un índice
glucémico bajo pues al contar con fibra ésta hace que se ralentice la
descomposición en el torrente sanguíneo.
Está de moda demonizar los alimentos con índice glucémico
alto y en parte estoy de acuerdo pero ojo hay que saber utilizar estos
alimentos cuando sean necesarios. Además, hay que tener en cuenta el valor
nutricional de ese alimento porque nos puede convenir consumirlo por sus
propiedades nutricionales.
Por ejemplo, en dietas de adelgazamiento estos alimentos no
están recomendados y hay que reducirlos al mínimo o utilizarlos cuando se vaya
a realizar algún ejercicio físico.
Pero un deportista, por ejemplo, un ciclista o un atleta
debe consumir estos alimentos durante la competición o inmediatamente después
de acabar para tener energía al instante y recuperar la que se va perdiendo por
el esfuerzo.
Espero que con este breve resumen haya arrojado algo de luz sobre este interesante
tema que da para mucho. Como conclusión recordad que en líneas generales, son
mucho más recomendables los alimentos con índice glucémico bajo aunque no por
ello hay que desterrar de la dieta los que tengan uno elevado.